Fueros y liberalismo. Guerras carlistas y cuestión foral. (1833-1876)

De Portfolio Academico

Pertenece al temario de Historia (2012-2013)

El país vasco y todos los territorios de la monarquía hispánica presentaban unas características similares hasta el siglo XIX.

El sistema político era muy sencillo:

  • Todos tenían en común un rey
  • Cada territorio tenia sus propias instituciones, impuestos, leyes y fueros.

Tras la llegada de los Borbones en la Guerra de Sucesión, se inició un proceso de centralización, cuyo primer paso fueron los decretos de nueva planta; y su ultimo paso fue la abolición de los fueros vascos en 1876. Uno de los rasgos mas significativos de los siglos XVIII y XIX fue el mantenimiento de los fueros vascos.

No es correcto hablar de sistema foral vasco, ya que cada territorio poseia fueros diferenciados, los cuales daban a los diferecntes territorios distintas nomenclaturas (Reino de Navarra, Provincia de Gipuzkoa, Señorío de Bizkaia, Hermandad de Alava)

En la Edad Media a las leyes se les dio el nombre de fueros. Estas leyes eran particulares de una ciudad, una región, un grupo social o una institución.

Su origen es doble:

  • como privilegios concedidos por el rey
  • costumbres no escritas de un territorio convertidas en escritas por su idoneidad.

Su polemica surgió a raiz de esa interpretacion, dado que el rey consideraba que eran privilegios y las instituciones que eran costumbres.

Los fueros son, por tanto, un sistema politico limitado.

Los fueros establecian un regimen de soberania compartida entre el rey y los territorios vascos, cuyos rasgos eran:

  • Dotar de una gran autonomía, dado que estaban jurados por el rey y los fueros otorgan el derecho de no aplicar leyes perjudiciales para los fueros, llamado pase foral.
  • El singular sistema de representacion, donde existian las juntas generales y las diputaciones, y el rey era representado por un regente en Bizkaia y Gipuzkoa, por un diputado general en Alava y por un virrey en Navarra.
  • Los privilegios otorgados eran la exencion de impuestos y de servicio, derecho civil y penal propio e hidalguia universal, de forma que todos los nacidos en estos territorios pertenecian como mimino al estrato mas bajo de la nobleza.

Evolucion y adaptacion del sistema foral

El sistema foral fue modificandose para adaptarse al liberalismo y al sistema constitucional.

En el siglo XVIII los borbones inician un proceso de centralizacion y unificacion del estado, mediante los Decretos de Nueva Planta, las provincias administrativas e impuestos comunes. La ilustracion puso en el punto de mira a los fueros.

Durante el reinado de Carlos III, y por efecto de la ilustracion, se creó la Real Sociedad Vascongada de Amigos del Pais.

Durante el reinado de Carlos IV, las provincias de Behe Nafarroa, Lapurdi y Zuberoa pasaron al control de la administracion francesa. El Pais Vasco, por su parte, sufrió los efectos de la Guerra de la Convencion. Durante el gobierno de Godoy se dio el primer enfrentamiento entre la burguesia liberal urbana y los jauntxos por el poder de las intituciones forales.

Durante la guerra de la independencia hubo un gren momento de espectacion. En 1808 se barajó abolir los fueros, aunque no se llevo a cabo. En 1810, Napoleon suprimió el sistema foral. En 1812 las cortes plantearon si los fueros y el liberalismo eran compatibles. En la constitucion de dichas cortes no se hacia mencion a dichos fueros. Todos los territorios excepto Bizkaia aprobaron dicha consitutcion.

A partir de ese momento el Pais Vasco se enfrentó a negociar y adaptar su sistema foral al nuevo regimen constitucional.

Durante el reinado de Fernando VII se dieron tres etapas.

En el Sexenio absolutista se recuperró la autoridad anteror de los jauntxos en las instituciones forales, se implantaron las aduanas en el interior y se restableció la Ley del Mayorazgo.

Durante el trienio liberal se suprimió el regimen foral, las intituciones volvieron a ser elegidas por sufragio (aunque se aplicaria la tecnica del fraude), las aduanas se limitarian a la costa y se suprimiria la ley del Mayorazgo. Asimismo, el liberalismo se fue afianzando en las ciudades.

En el ultimo periodo de Fernando VII, la decada ominosa, se recuperró la autoridad de los jauntxos en las instituciones forales, se implantaron las aduanas en el interior y se restableció la Ley del Mayorazgo. La perdida de las colonias en perjudicó a las exportaciones vascas. Surgieron las partidas de voluntarios realistas, y la sociedad se dividió entre una mayoria absolutista pro-fueros y una minoria pro-liberal.

El reinado de Isabel II respecto a los fueros se divide en cuatro apartados.

Durante la Regencia de Maria Cristina, España inicia la construccion del liberalismo y el pais vasco esta sumergido en la primera guerra carlista. Se produce entonces un enfrentamiento entre las intituciones forales y las provinciales. Los principales hechos que atacaron a los fueros fueron las constituciones de 1834 y 1837 y las desamortizaciones de Mendizabal. Tras la perdida de la primera guerra carlista se iniciará el primer proceso de adaptacion foral.

En la regencia de Espartero, y como consecuencia de la perdida de la guerra carlista, la adaptacion de los fueros se daria, en primer lugar con Navarra, mediante la ley paccionada, y despues en el Pais Vasco, mediante un decreto, ambos en 1841.

Duarnte la decada moderada, se volveria a la situacion anterir a 1840, a excepcion de las aduanas y del pase foral, que se perderian. En la duplicidad entre el poder de las diputaciones forales y las provinciales, surgirian los gobiernos mixtos. Se dio un acuerdo entre liberales y fueristas que benefició a ambos, ya que se ganaron competencias.

En el resto del reinado de Isabel II predominaria la estabilidad. La segunda Guerra carlista no afectó al Pais Vasco, y se consiguió un aumento de competencias, especialmente en el moderantismo.

El sexenio democratico fue un periodo revolucionario que respetó los fueros. Durante esta etapa se produjo un choque religioso entre los revolucionarios y los vascos. Con la eleccion de Amadeo de Saboysa como Rey de España, se inicó la tercera guerra carlista, con el fin de defender la religion catolica.

Durante la restauracion finalizó la tercera guerra carlista, en 1876. A consecuencia de ella, se aprobó la ley abolitiva de los fueros. Poco despues, Canovas del Castillo concedió a Pais Vasco y Navarra los conciertos economicos, es decir, la cpacidad de recaudar impuestos y de negociar la cantidad o cupo a pagar al estado.

Primera Guerra Carlista

Este conflicto tuvo dos bandos claramente diferenciados. Por un lado, los carlistas, defensores de Carlos Maria Isidro, del absolutismo y del antiguo regimen. Su ideologia se basaba en la defensa de los fueros, de la propiedad tradicional de la tierra y del integrismo religioso. Su lema era "Dios, patria, fueros y Rey". Los campesinos del norte, la pequeña nobleza, el clero conservador y los artesanos secundaron este bando. Sus lideres fueron Zumalacarregui y Maroto. Por otro lado se encontraban los isabelinos, defensores de Isabel, de las ideas ilustradas del siglo XVIII y de la revolucion francesa y americana. Su ideologia se basaba en la defensa del gobierno constitucional y la legislacion centralista unica, asi como la sociedad civil no mediatizada por la religion. Las clases ilustradas, los burgueses y el proletariado urbano secundaron este bando.

Esta guerra se produjo, ademas de por la cuestion sucesoria, por la habil estrategia de los carlistas de aunar el antiguo regimen con el movimiento fuerista. Esto pordujo que, ademas, el principal escenario en esta guerra fuese el Pais Vasco.

La guerra comenzó con la predominancia del carlismo, ya que aprovecharon el retraso del comienzo que arrastraba el movimiento isabelino. En este periodo los carlistas comenzaron con su organizacion territorial. Sin embargo, con Zumalacarregui al frente, y visto el exito en anteriores campañas, los carlistas decidieron tomar Bilbao, lo que concluyó con la muerte del caudillo y el declibe de los carlistas. Estos decidieron, bajo la direccion de Maroto, camabiar de estrategia y dirigirse hacia la meseta, lo que supuso el fin de esta guerra.

Esta guerra supuso, por un lado, la victoria de los isabelinos y la consagracion de su reinado y, por otro, la integracion del regimen foral, dado que al final de la guerra se firmó el Pacto de Bergara, que estableció la integracion de los fueros en el regimen constitucional.

Tercera Guerra Carlista

Esta guerra congregó a los dos bandos de la anterior, ya evolucionados y con nuevos lideres. Por un lado, los carlistas, con Carlos VII a la cabeza, respaldado por generales como Ollo o Santa Cruz